Estos son los principales errores que cometemos al ponernos a organizar los diferentes espacios de nuestro hogar.
En este post os queremos hablar de errores que todos cometemos al intentar organizar los diferentes espacios de nuestro hogar. Es importante destacar que hay que tener en cuenta el resto de nuestra familia o compañeros de vivienda a la hora de disponerse a organizar los espacios comunes, no hacerlo sería el primero y mayor de los errores. También os sugerimos algunas soluciones de ordenación, todos de la firma iDESIGN
En demasiadas ocasiones nos dejamos llevar por malos hábitos, una cierta inercia que nos hace dejar para “más tarde” la inevitable acción de deshacerse, regalar, vender o ubicar en el sitio correcto nuestras cosas. Es esta inercia a prolongar el eterno desorden la que desencadena que llegue el momento insostenible, cuando se nos hace inevitable ponerse a la tarea de organizar nuestro hogar. Sin duda ya es un error haber llegado a este momento…
Por fin hemos decidido que ha llegado el dia “D”, de este fin de semana no pasa. El sábado por la mañana nos dedicaremos a comprar todo lo necesario, los contenedores mejores, un montón de perchas y cajas para encima de los muebles, y cuando los tengamos empezaremos a organizar
No sabrás lo que necesitas comprar hasta que no sepas exactamente lo que vas a ordenar.
Quizá te cargues de inútiles cajas, y además estas acabarán siendo otro estorbo más que necesite su propio espacio donde ser ubicado. Este es un error muy común que todos hemos cometido en muchas ocasiones. Es siempre mejor, limpiar, tirar, en definitiva, quedarnos con lo que realmente queremos mantener, antes de acometer la tarea de la organización de los espacios. Solo entonces es el momento de proveerse de los artículos de organización que realmente necesitemos.
Falta de planificación del tiempo que dedicaremos a ordenar.
Si pensamos que en un rato podemos acabar con todo, estamos equivocados, y corremos el riesgo de dejarlo para otro día. Céntrate en un espacio concreto que te interese, bien sea la cocina, frigorífico, alacena, y dedícale el tiempo que necesita, estableciendo tus criterios para ese sitio. De esta manera tendrás más claro cómo quieres que se vea a partir de ahora, y, sobre todo, que utilidad le vas a dar ese espacio de tu hogar.
Intentar mantener un orden exagerado, que no se ajuste a tu estilo de vida.
No hay que pasarse, fundamentalmente por que no conseguiremos mantener ese nivel de orden, y quizá tampoco lo necesitemos. Cada casa y cada uno tenemos que buscar nuestra propia fórmula que nos permita convivir con nuestras cosas en armonía.
Copiar estilos de vida que no se ajustan a nuestras necesidades
Puede ser absurdo, y, sobre todo innecesario. Las casas de prescriptores, celebrities pueden darnos ideas, pero no deben influirnos en demasía. Al fin y al cabo, no suelen vivir en pisos del tamaño medio de España, que están entre los 60 y los 90m2.
Ocupar espacios de fácil acceso con artículos de temporada o poco uso es uno de los errores más comunes.
Menaje para picnic, o ropa de otras estaciones, no tenemos porque tenerlas constantemente a la altura de los ojos. Busquemos para ellas las zonas de no tan cómodo acceso, o inclusive, bien organizadas, en algún baúl en el garaje.
Cajas y contenedores de almacenamiento demasiado grandes pueden ser un obstáculo
En muchas ocasiones se convierten en auténticos olvidaderos de artículos, que acaban reposando en la base de la caja sin que nunca sepamos de ellos, hasta que llega el día que los echamos en falta. En las habitaciones de los pequeños de la casa, y especialmente con sus juguetes, se ve más claramente. Las cajas demasiado grandes para los juguetes facilitan que se caigan al fondo y se pierdan, haciendo que el desastre sea total cuando el pequeño quiera recuperar alguno y tengamos que vaciarla para encontrarlo. De esta manera solo conseguimos una cosa: perpetuar el desorden, ocultando las cosas de la vista. Son preferibles las canastas grandes para juguetes de gran tamaño y contenedores divididos más pequeños para juguetes pequeños. Los contenedores transparentes de un tamaño mediano también serán de gran ayuda.
Estas son algunas sugerencias:
Resignarse a la estructura de los armarios y no modificarlos.
Un armario tiene que ir cambiando a lo largo que los ocupantes de la casa modifican también sus necesidades. Aceptar la disposición que viene de fabrica del armario es un grave error. Añadir nuevas barras, separar cajoneras, eliminar baldas, perchas plegables… en ocasiones pueden ayudar a convertir un armario pobre en un armario muy útil y cómodo, en el que podamos encontrarlo todo rápidamente.
Modificar el espacio útil de nuestro armario o vestidor puede ser sencillo.
Depender de jornadas maratonianas y espaciadas en el tiempo para mantener la casa en orden.
Cuanto más a menudo practiques la organización, más automática se vuelve. Organiza por espacios pequeños, no seas demasiado ambicioso. Asume lo bueno que te aporta el orden y ponlo en valor, piensa en el tiempo que te ahorrará, la sensación de equilibrio que comporta…. Solo así crearás un habito que lleve a que no vuelvas a necesitar recurrir a agotadoras jornadas de orden , que por otra parte estarán plagadas de errores.
