Cocinar es un arte que evoluciona constantemente, y hoy, el acero inoxidable se encuentra en el centro de esta transformación. Este material, conocido por su durabilidad, resistencia y sostenibilidad, está ganando protagonismo en las cocinas de todo el mundo, gracias a su capacidad para combinar funcionalidad con cuidado del medio ambiente. En este escenario, marcas como Inoxibar, Bra, Ibili o Rösle están marcando la pauta, destacándose como referentes en esta tendencia.
El acero inoxidable se ha consolidado como una elección predilecta para quienes buscan calidad y sostenibilidad en su menaje de cocina. Este material es resistente a la temperatura, la corrosión y la oxidación, además de ser fácil de limpiar y seguro para el contacto con alimentos, ya que no altera los sabores. Al final de su vida útil, puede reciclarse, convirtiéndose en una opción ideal para reducir la huella de carbono y promover un estilo de vida más consciente.
En países europeos, las restricciones al uso de materiales menos seguros, como el aluminio sin protección, han impulsado aún más esta tendencia. Este cambio no solo responde a una mayor concienciación medioambiental, sino también al deseo de cocinar de manera saludable y minimizar los residuos.
Proceso de fabricación en la factoría de Inoxibar
Inoxibar se refuerza con el auge del acero inoxidable
Inoxibar está consolidando su posición como fabricante de menaje de cocina gracias al creciente interés por el acero inoxidable, símbolo de calidad, durabilidad y sostenibilidad en la cocina.
Con una trayectoria basada en la innovación y la sostenibilidad, Inoxibar ha consolidado su posición como un fabricante destacado de menaje de cocina de acero inoxidable. En su planta en Bizkaia, produce utensilios utilizando más de un 90% de materia prima reciclada y empleando tecnología avanzada para garantizar la máxima calidad.
El compromiso de Inoxibar con el acero inoxidable ha sido ampliamente recompensado, como lo demuestra el incremento del 50% en las ventas de sus sartenes de este material durante el último año.
“se lleva produciendo en los últimos años, pero ahora es más pronunciada, lo que hemos visto reflejado en las ventas. A finales de año podremos comparar con más claridad la variación, pero podemos estar hablando de un incremento superior al 50% en ventas con respecto al último año.”- Aitor Marcaide, responsable de la marca.
Nuevas sartenes Triline
Para dar respuesta al actual interés por la calidad y la sostenibilidad Inoxibar ha incorporado recientemente la nueva familia de sartenes de acero inoxidable Triline.
La reciente introducción de la línea de sartenes Triline reafirma esta apuesta. Estas sartenes combinan acero inoxidable 18/10, aluminio y acero inoxidable 18%, ofreciendo una distribución uniforme del calor y una gran resistencia estructural. Los modelos, disponibles en diversas configuraciones, incluyen opciones con y sin revestimiento antiadherente, adaptándose a diferentes necesidades culinarias.
La gama incluye dos modelos Tri Sport -con mango de silicona y acero- y Tri Luxe -íntegramente en acero inoxidable-, que se presentan en tamaños, de 20, 24 y 28 cm de diámetro.
La importancia de cocinar sobre acero inoxidable
El uso de acero inoxidable no solo eleva la calidad de las preparaciones, sino que también refleja un compromiso con el medio ambiente y la salud. Los utensilios fabricados con este material garantizan una cocción uniforme y segura, prolongan su vida útil con un mantenimiento adecuado y contribuyen a un mundo más sostenible al ser reciclables.
Desde Inoxibar4, sin embargo nos recuerdan que siempre hay excepciones
“El acero inoxidable no es la solución perfecta en todos los casos; al cocinar alimentos con altos niveles de azúcar o proteínas estos se pueden pegar con facilidad. Es entonces cuando entra en juego una sartén con un buen revestimiento antiadherente.”
En conclusión, el acero inoxidable no es una moda pasajera, sino una solución práctica y duradera para la cocina contemporánea. Con líderes como Inoxibar, esta tendencia no solo promete transformar nuestras cocinas, sino también nuestro impacto en el planeta. ¡Cocinar nunca ha sido tan gratificante!
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